Hoy es 26 de abril y se celebra el "Día Internacional del Libro", y al igual que el día de la poesía, quería dedicar especialmente unas palabras, para esta ocasión he reservado durante tiempo un cuento que he ido construyendo poco a poco y mejorando para poder publicarlo hoy.
Podría escribir cada día algún motivo de porque es necesario leer, pero hay muchos, demasiados, ya que al igual que los pequeños mundos dentro del interior de cada uno, existen pequeñas y grandes razones por las que cada cual dirige su mirada hacia un libro y centra su mente en el mismo.
Simplemente me limitaré a escribir mis razones, a intentar expresar lo que siento cuando tengo cualquier lectura enfrente de mí.
Mi razón principal para leer sin importar el tipo de lectura, ni el formato de la misma, donde centro mis ojos y mi atención, es para aprender más, para conocer otros mundos, para crecer, porque me anima a seguir escribiendo y a mejorar.
Mi razón principal para leer sin importar el tipo de lectura, ni el formato de la misma, donde centro mis ojos y mi atención, es para aprender más, para conocer otros mundos, para crecer, porque me anima a seguir escribiendo y a mejorar.
No es fácil expresar ese sentimiento, emoción e ilusión que obtengo, que siento cuando leo, ni siquiera con las palabras, pero lo intentaré es algo que deseo hacer.
Leyendo eres capaz de meterte dentro de la historia, de identificarte con el protagonista e incluso intentar entender lo que el autor o la autora pensaban al escribir semejante historia, quizás es algo que me acerca a veces a comprender los sentimientos del otro.
A mi la lectura me ha hecho muchas veces cambiar mi forma particular de ver la vida, tanto la mía como la de los demás, de darme cuenta de las dificultades encontradas, de los obstáculos tanto visibles como invisibles que se introducen en nuestro camino, de ser capaz de esquivarlos, y de enfrentarse a ellos si es el caso. Diciendo esto, creo que me da la fuerza y me incentiva para caminar cada día más y más.
No todos los relatos son los mismos, pero creo que todos te ayudan de alguna manera, y aprendes algo por mínimo que sea, dentro de la profundidad de cada palabra se esconde un sentido visible que se intenta dar, o simplemente un sentido oculto, para que uno opine y reflexione sobre lo que su mente entienda.
Ya os dejo con mi mini cuento, espero que os guste.
A mi la lectura me ha hecho muchas veces cambiar mi forma particular de ver la vida, tanto la mía como la de los demás, de darme cuenta de las dificultades encontradas, de los obstáculos tanto visibles como invisibles que se introducen en nuestro camino, de ser capaz de esquivarlos, y de enfrentarse a ellos si es el caso. Diciendo esto, creo que me da la fuerza y me incentiva para caminar cada día más y más.
No todos los relatos son los mismos, pero creo que todos te ayudan de alguna manera, y aprendes algo por mínimo que sea, dentro de la profundidad de cada palabra se esconde un sentido visible que se intenta dar, o simplemente un sentido oculto, para que uno opine y reflexione sobre lo que su mente entienda.
Ya os dejo con mi mini cuento, espero que os guste.
Pensando como la luna
Es de noche, aproximadamente las 2.00 am, y Daisy sigue despierta, no puede dormir, solo necesita mirar la luna como cada día nocturno, no sabe bien porque razón pero siente la necesidad de hacerlo, se siente más cercana a ella.
Desde los sueños más reales y profundos que nunca pudiera imaginar siempre le llamaba la luna, en cada momento, en cada segundo de su vida, y no solo cuando dormía, sino cuando estaba despierta, ya no sabía lo que creer, ni lo que era real o no.
Realmente podía sentir con cada halo de luz como si los latidos de su corazón se solaparán con los suyos es extraño, pero para Daisy cada cráter de la luna, lo sentía como las válvulas que bombean la sangre a su motor de vida, como las conexiones del camino de la estrella grisácea como casi siempre se muestra.
Estos sentimientos no podía mostrarlos y expresarlos, ni a su familia, ni a sus amigos, porque sabía que no le entenderían, y que probablemente pensarían que son alucinaciones suyas.
Para Daisy, ¿qué es la luna? ella se basa en los conceptos reales, pero también en algo difícil de comprender. Daisy sabe que luna es una estrella que siempre nos acompaña, eso suele repetirse a sí misma incansablemente y su color y aspecto varían dependiendo de la luz del sol.
Casi siempre la vemos con tonos grisáceos, es casi su color natural, y a veces la podemos ver naranja, o con tonos rojizos e incluso dorada.
Realmente podía sentir con cada halo de luz como si los latidos de su corazón se solaparán con los suyos es extraño, pero para Daisy cada cráter de la luna, lo sentía como las válvulas que bombean la sangre a su motor de vida, como las conexiones del camino de la estrella grisácea como casi siempre se muestra.
Estos sentimientos no podía mostrarlos y expresarlos, ni a su familia, ni a sus amigos, porque sabía que no le entenderían, y que probablemente pensarían que son alucinaciones suyas.
Para Daisy, ¿qué es la luna? ella se basa en los conceptos reales, pero también en algo difícil de comprender. Daisy sabe que luna es una estrella que siempre nos acompaña, eso suele repetirse a sí misma incansablemente y su color y aspecto varían dependiendo de la luz del sol.
Casi siempre la vemos con tonos grisáceos, es casi su color natural, y a veces la podemos ver naranja, o con tonos rojizos e incluso dorada.
También la podemos ver de diferentes formas, eso son las fases lunares: luna nueva, cuarto creciente, luna llena y cuarto menguante.
A Daisy cuando más bella le parece es cuando es luna llena y su color es dorado, realmente es maravillosa, parece que el fuego se funde en ella, el reflejo perfecto del sol.
Se imagina entonces ¿qué es lo que pensará la luna? ¿será posible eso?
Y le dice diariamente:
"No sé si te darás cuenta de todo lo que nos ofreces, no sé si serás consciente, desprendes gran belleza y verte reflejada en el agua del mar, de un río o un lago, hace que me imagine lo que sientes, puedo ver tu sonrisa cuando te miro directamente y te veo doblemente sonreír y feliz en cada reflejo.
Además cada vez que te miro me veo en ti, y siento todo la calma que desprendes, siento tu corazón, toda tu viveza. Ya entiendo porque atraes tanto a los seres vivos de la tierra y es por tu gran claridad y esa luz tan especial que irradias".
"No sé si te darás cuenta de todo lo que nos ofreces, no sé si serás consciente, desprendes gran belleza y verte reflejada en el agua del mar, de un río o un lago, hace que me imagine lo que sientes, puedo ver tu sonrisa cuando te miro directamente y te veo doblemente sonreír y feliz en cada reflejo.
Además cada vez que te miro me veo en ti, y siento todo la calma que desprendes, siento tu corazón, toda tu viveza. Ya entiendo porque atraes tanto a los seres vivos de la tierra y es por tu gran claridad y esa luz tan especial que irradias".
Daisy seguía alabándola cada día, y le dedicaba palabras amables, lo último que decía cada noche que se iba a la cama era:
"Lunita se que me oyes y que sientes mis palabras, todo mi cariño y admiración hacia ti, eres como los ojos de las personas, iluminas mi sendero en la vida, siempre me acompañas, y aunque no te vea, se que estás ahí, eres como un espejo en el que mirarse, sabes que puedes verte hasta que se rompa. Me haces sentir cuando te miro que todo es posible, me animas a mejorar, a crecer tanto como tú, a llegar incluso a flotar".
Para su sorpresa una mañana que se levantó, miró hacía el cielo y vio a la luna sonreír de día, nunca la había visto de esa forma, no le veía completamente, pero si podía sentir su belleza.
Pensó: "Si te veo de día al igual que de noche, ¿debe ser por algo, no? eso es que has escuchado todas mis palabras, todos mis sentimientos y quieres estar siempre mostrándote en mi cielo".
Daisy seguía maravillándose, de ese extraño fenómeno. De nuevo llegó la noche y por fin la luna se le acercó a su ventana, deslumbrando sus ojos y le expresó unas palabras:
"Mi pequeña y dulce niña, todo este tiempo has estado velando por mí, siempre me ofreces tus mejores palabras y deseos. Gracias por todo, mereces que por primera vez en mi existencia pueda acercarme a ti y al menos expresarte estas humildes palabras. Solo quiero decirte que todas las palabras que me dedicas son dignas de plasmarse en un hoja de papel, a través de ellas transmites mucho sentimiento, por lo que mi consejo es que a partir de ahora empieces a escribir, sin miedo a compartir. Siempre voy a estar para escucharte, y guiarte en cada noche y en algunos momentos del día, pero recuerda, no pierdas esa sensibilidad y escribe todo lo que salga de tu corazón."
"Lunita se que me oyes y que sientes mis palabras, todo mi cariño y admiración hacia ti, eres como los ojos de las personas, iluminas mi sendero en la vida, siempre me acompañas, y aunque no te vea, se que estás ahí, eres como un espejo en el que mirarse, sabes que puedes verte hasta que se rompa. Me haces sentir cuando te miro que todo es posible, me animas a mejorar, a crecer tanto como tú, a llegar incluso a flotar".
Para su sorpresa una mañana que se levantó, miró hacía el cielo y vio a la luna sonreír de día, nunca la había visto de esa forma, no le veía completamente, pero si podía sentir su belleza.
Pensó: "Si te veo de día al igual que de noche, ¿debe ser por algo, no? eso es que has escuchado todas mis palabras, todos mis sentimientos y quieres estar siempre mostrándote en mi cielo".
Daisy seguía maravillándose, de ese extraño fenómeno. De nuevo llegó la noche y por fin la luna se le acercó a su ventana, deslumbrando sus ojos y le expresó unas palabras:
"Mi pequeña y dulce niña, todo este tiempo has estado velando por mí, siempre me ofreces tus mejores palabras y deseos. Gracias por todo, mereces que por primera vez en mi existencia pueda acercarme a ti y al menos expresarte estas humildes palabras. Solo quiero decirte que todas las palabras que me dedicas son dignas de plasmarse en un hoja de papel, a través de ellas transmites mucho sentimiento, por lo que mi consejo es que a partir de ahora empieces a escribir, sin miedo a compartir. Siempre voy a estar para escucharte, y guiarte en cada noche y en algunos momentos del día, pero recuerda, no pierdas esa sensibilidad y escribe todo lo que salga de tu corazón."
Daisy no podía creer lo que acababa de pasar, de tanta emoción, no pudo decirle nada a luna, solo deseaba escucharla, y grabar en su mente sus grandes consejos.
Y desde entonces Daisy tomo una decisión y comenzó a escribir y a escribir, no paraba de hacerlo, e incluso llegó a compartirlo con su familia y sus amigos, se armó de valor, teniendo en mente que aunque no les agradara o pensaran lo que pensaran, no importaba, porque sabía que a luna sí, y simplemente Daisy escribía por y para sí misma porque así lo sentía y era algo que le encantaba.
Me gustaría transmitiros un breve mensaje:
"Sin escritura no hay lectura, nunca dejéis de escribir si tenéis algo que decir, ni de leer para mejorar vuestra forma de expresaros, no temáis a que a alguien no le pueda agradar, solo hacerlo por vosotros y compartirlo si lo deseáis, es el mejor consejo que os puedo dar, no dejéis de hacer lo que os hace sentir vivos por miedo".
Y para terminar quiero dedicar este post a todas aquellas personas que escriben y leen, que comparten sin miedo, que continuamente fomentan la lectura, que no se cansan, y siguen y avanzan, a quien le salte el corazón, a quien la vive y se llena de emoción.
Últimamente he conocido y ya conocía a personas que escriben de una manera maravillosa, por lo que me gustaría incluir sus nombres aquí porque admiro su forma de expresarse, son personas que a la vez tienen un gran corazón y a quienes aprecio mucho: Anais (@anagohe), Gema (@gemadp), Mercè (@mercesori).
Aunque muy especialmente a quien se lo dedico es a mi amiga Anais (@anagohe) por estar siempre ahí desde la infancia, por escribir tan bonito, por simplemente formar parte de mi vida y ser más que una amiga para mí, una hermana.
Y desde entonces Daisy tomo una decisión y comenzó a escribir y a escribir, no paraba de hacerlo, e incluso llegó a compartirlo con su familia y sus amigos, se armó de valor, teniendo en mente que aunque no les agradara o pensaran lo que pensaran, no importaba, porque sabía que a luna sí, y simplemente Daisy escribía por y para sí misma porque así lo sentía y era algo que le encantaba.
FIN
23-4-2012 by NoeBranford
Me gustaría transmitiros un breve mensaje:
"Sin escritura no hay lectura, nunca dejéis de escribir si tenéis algo que decir, ni de leer para mejorar vuestra forma de expresaros, no temáis a que a alguien no le pueda agradar, solo hacerlo por vosotros y compartirlo si lo deseáis, es el mejor consejo que os puedo dar, no dejéis de hacer lo que os hace sentir vivos por miedo".
Y para terminar quiero dedicar este post a todas aquellas personas que escriben y leen, que comparten sin miedo, que continuamente fomentan la lectura, que no se cansan, y siguen y avanzan, a quien le salte el corazón, a quien la vive y se llena de emoción.
Últimamente he conocido y ya conocía a personas que escriben de una manera maravillosa, por lo que me gustaría incluir sus nombres aquí porque admiro su forma de expresarse, son personas que a la vez tienen un gran corazón y a quienes aprecio mucho: Anais (@anagohe), Gema (@gemadp), Mercè (@mercesori).
Aunque muy especialmente a quien se lo dedico es a mi amiga Anais (@anagohe) por estar siempre ahí desde la infancia, por escribir tan bonito, por simplemente formar parte de mi vida y ser más que una amiga para mí, una hermana.
Título: Himalayan Moonrise. Fotografía tomada por Swamysk. |
photo credit: swamysk via photo pin cc
Enlace de flickr a la fotografía "Himalayan Moonrise":
http://www.flickr.com/photos/swamysk/364525626/
Enlace a la segunda fotografía de la luna:
http://www.freephotosbank.com/photographers/photos1/34/med_822205f8a757638b106a2109773a1fc1.jpg
Jo, muchas gracias Noe, pero sabes que no me tienes que agradecer nada, siempre estaré aquí para lo que necesites. Bonito post.
ResponderEliminarUn beso fuerte y sigue así.
Lo mismo te digo mi pequeña, no me lo agradezcas, por ti lo que sea, siempre que pueda.
EliminarNunca dejes de escribir, sigue haciéndolo poco a poco, sigue transmitiendo tanta energía, emoción y dulzura con tus palabras, siempre tendrás mis ojos para leerte.
Un abrazo enorme de los que siempre regresan.
Muchísimas gracias linda! Ahora mismo me apetecería escribir un relato, solo para que lo leyeras, pero tendrá que esperar, ya sabes, días de locos!!! Pero muchas gracias, ha sido una suerte conocerte!
ResponderEliminarUn beso
Un placer bonita, gracias por eso de tener la intención de escribir el relato para que lo leyera yo, y lo de es una suerte conocerte.
EliminarLa suerte es mía de conocerte y de poder compartir a ratos palabras contigo, de intercambiar opiniones y sueños que como bien dices son el principio de los hechos, y no son tan locos como tus días.
No dejaré de soñar, es algo que te prometo.
Mil gracias a ti siempre por estar dispuesta a leerme y por tu gran apoyo, por tu ayuda y ánimos, sin eso difícil sería seguir escribiendo, y de intentar lograr mis sueños.
Un abrazo y un besazo.
Precioso Noe. Todos necesitamos mirar a la luna de vez en cuando, parar en este mundo loco y tomar un respiro...Ella siempre estará ahí para nosotros.
ResponderEliminarBesos
Gracias Ana, siempre está ahí, eres otro gran ángel que me cuida, vela por mi en la distancia y me apoya mucho siempre.
EliminarSiempre que te digo algo en cuanto sacas un ratio me lees, eres demasiado linda.
Tienes razón, tenemos que mirar a la luna fijamente y si hay estrellas alrededor mucho mejor, y respirar profundamente, y solo escuchar los sonidos ambientales, y dejarnos llevar sin pensar, tener un momento de paz, como si solo estuviéramos nosotr@s con la luna.
Un día que vengas por Villamayor, sería bueno tener la oportunidad de en un rato mirar juntas la luna, en silencio, que desde aquí se ve mucho mejor que en la ciudad, o simplemente verla en Doñinos, algo más en común que tenemos, que a ambas nos encanta.
Mil gracias por estar ahí como la luna, aunque no pueda verte siempre y hablar contigo, si puedo sentirte cerca.
Mil besos de los colores de la luna para ti.
También a mi me encanta mirar a la luna, y a ella sí le he susurrado secretos, y a ella le he reído, y a ella le he llorado, y a ella le he hablado y a ella le he pedido que lleve mis palabras a quienes quiero.
ResponderEliminarUn abrazo Noe, un placer seguirte
Gracias guapa por pasarte y comentar.
EliminarTus palabras son preciosas, y me encantan has compartido con la luna verdaderas emociones y sentimientos como si fuera una gran amiga.
Creo que todos hemos hecho lo mismo, yo incluso mucho más con las estrellas, pero son tantas, que no me decidía a mirar fijamente a una y decirle todo lo que pensaba y sentía, lo expresaba a todas las que tenía al alcance de mi vista.
Espero y deseo que las musas se acerquen a ti esta noche y el resto del tiempo.
Un gran abrazo.